No se lo pensó y entró. Los niños que allí estábamos no dudamos en ayudarla a encontrar su bosque y para ello nos impregnó con sus dorados polvos mágicos, nos ofreció para que probásemos sus frutos de otoño y su calabaza nos llenó de fuerza para buscar,
Y al fin siguiendo el rastró del aroma encontramos su bosque lleno de hojas y el Hada muy amable nos invitó a entrar en el y jugar.
Ha sido una mañana mágica y llena de fantasía.
Hemos descubierto que el otoño puede ser una estación del año maravillosa...¡¡Gracias Hada del Otoño!!
SALUDOS DE TODO EL EQUIPO Y SUS PEQUES
Y así pintamos hace unos día nuestros búhos. Gracias a todos por aportar tantas piñas, así como hojas secas, sin las cuales no hubiera sido posible esta bonita actividad. Gracias en especial a la abuela de Nicolás, que aunque ya se fue al cole de mayores nos trajeron un montón de hojas. Nos acordamos mucho de ti, y te mandamos todos un besote.
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